Quienes Somos

 

Historia

Estamos ante un negocio familiar de varias generaciones. Casa Ugalde comienza su andadura hacia 1930 cuando Manuel Ugalde Asenjo, el abuelo del actual promotor, regresa de Cuba de hacer las américas e invierte el capital obtenido de vender su bodega de Cuatro Caminos en La Habana en su pueblo natal, donde junto con su esposa Piedad adquieren un antiguo comercio de telas y alimentación para crear el bar-tienda y casa de comidas.

En los años 60 del siglo pasado la casa de comidas, en manos de los padres del actual promotor Manuel Ugalde Rodríguez y Zulima Menéndez, adquirió un auge enorme llagando a darse una media de 60 comidas al día, gracias a la implantación en la zona de la fábrica de Nestlé. Y el bar tienda tenía también gran rentabilidad, abasteciendo a los habitantes de su radio de influencia, de todos los productos que necesitaban: alimentación, droguería, indumentaria, ropa de hogar y también ferretería y productos para la actividad agrícola y ganadera de la zona.

En los años 70 la tienda se instala en un local anexo al igual que el restaurante y fue un bar tienda de referencia para:Cazadores que venían en grupo a la zona a realizar su actividad, principalmente jabalíes y corzos. Y dejaban en Casa Ugalde las piezas para que las cocinaran y luego las degustaban acompañados de sus esposas y otros amigos. Adquirieron gran prestigio las recetas ideadas por la cocinera y fundadora de Casa Ugalde, Piedad Rodríguez Fernández, hasta el punto que una de ellas fue publicada en el libro “Capreolus Deliciosus” editado por la Asociación del Corzo Español”

Esta actividad atraía turismo de primer nivel tanto regional como nacional para pescar Salmón y Trucha en una época en la que se permitía la comercialización.

Evolución y Adaptación

José María, es hijo y continuador actual de Casa Ugalde. Para garantizar la continuidad del negocio, ha hecho una reforma del mismo (con ayuda del gobierno del Principado de Asturias, dentro del Proyecto de Modernización del Comercio Rural Asturiano) para adaptarse a la evolución de la demanda y al contexto socioeconómico de la zona. Se traslada la tienda a la zona del bar, deja de ser casa de comidas y se crea el actual obrador para vender directamente pan, pasteles, tartas y empanadas.